Es un placer estar en esta Sesión Extraordinaria del Consejo Permanente para conmemorar el Día Internacional de Recuerdo de las Víctimas de la Esclavitud y la Trata Transatlántica de Esclavos, el cual se realiza por primera vez aquí en la OEA, cumpliendo con el mandato establecido en el Plan de Acción del Decenio de las y los Afrodescendientes en las Américas (2016-2025)
Durante más de 400 años millones de hombres, mujeres y niños africanos fueron víctimas de la deplorable trata transatlántica de esclavos, uno de los capítulos más deplorables de la historia de la humanidad. La trata transatlántica de esclavos fue cruelmente planificada, los esclavistas identificaron las culturas africanas para aprovechar su creatividad y utilizar sus tecnologías en las actividades mineras, en la agricultura, ganadería, medios de transporte, caza y pesca, etc.
Para conmemorar la memoria de las víctimas de este crimen de lesa humanidad, la Asamblea General de la ONU, en su resolución 62/122 del 17 de diciembre de 2007, declaró el 25 de marzo Día Internacional de Recuerdo de las Víctimas de la Esclavitud y la Trata Trasatlántica de Esclavos.
En la resolución se pedía la puesta en marcha de un programa de divulgación destinado a las instituciones educativas, la sociedad civil y otras organizaciones, con el objetivo de educar las futuras generaciones sobre las causas, consecuencias y lecciones del comercio transatlántico de esclavos, y para comunicar los peligros del racismo y sus prejuicios.
En ese sentido, todos los 25 de marzo de cada año, el Día Internacional de Recuerdo de las Víctimas de la Esclavitud y la Trata Transatlántica de Esclavos ofrece la oportunidad de homenajear y recordar a aquellas personas que sufrieron y murieron a manos de este brutal sistema de esclavitud. Este año, la ONU ha elegido el tema “Recordemos la esclavitud: reconozcamos el legado y las contribuciones de los afrodescendientes”.
Precisamente, una de las líneas estratégicas de nuestro plan de acción es el reconocimiento. Es imposible pensar en nuestros países sin la presencia y el aporte de las personas afrodescendientes. Nuestro ADN como continente tiene un gran componente afrodescendiente.
Lamentablemente, en la mayoría de nuestros países, ese aporte fue negado, invisibilizado y minimizado. Somos conscientes que la historia oficial de las Américas ha sido escrita a espaldas de las y los afrodescendientes. Desde la trata esclavista, los denominados colonizadores quitaron "el alma" a las personas de ascendencia africana para tratarlos como propiedad, minimizaron su cultura, les quitaron sus lenguas y trataron de eliminar todo vestigio de las mismas para poder dominarlos. Pero ellas y ellos resistieron, lucharon y sobrevivieron.
Aunque en el seno de la OEA, desde hace unos años reconocemos y celebramos las contribuciones y los logros de las y los afrodescendientes, personalmente creo que esto no ha sido ni es suficiente ya que el racismo, la discriminación, las formas conexas de intolerancia, la injusticia y la exclusión social siguen siendo parte de la vida de un número significativo de afrodescendientes de la región. No debemos olvidar que esto es producto principalmente de la esclavitud y su legado. En ese sentido, es de vital importancia reconocer las valiosas y numerosas contribuciones de las personas afrodescendientes en todos los aspectos de la existencia humana. Nuestra herencia africana debe ser conocida por todas y todos.
En ese sentido, creemos que la incorporación de la historia de África y la población afrodescendiente en la historia oficial de los países de las Américas debe ser una prioridad para los Ministerios de Educación de la región. Los Estados miembros se comprometieron a esto cuando adoptaron el plan de acción de afrodescendientes de la OEA y desde la Secretaría de Acceso a Derechos y Equidad vamos a dar todo nuestro apoyo y seguimiento a este compromiso.
Asimismo, estamos convencidos que con la firma, ratificación e implementación de la Convención Interamericana contra el Racismo, la Discriminación Racial y Formas Conexas de Intolerancia, así como con la implementación del Plan de Acción del Decenio de las y los Afrodescendientes en las Américas por parte de todos los Estados Miembros de la OEA, contribuiremos a pagar la deuda histórica que las Américas tienen con las y los afrodescendientes.
Desde la Secretaría General, en especial a través de la Secretaría de Acceso a Derechos y Equidad y de su Departamento de Inclusión Social, tenemos no solamente el mandato sino también el firme compromiso de promover el reconocimiento, la justicia y el desarrollo para millones de personas afrodescendientes en nuestra región.
Finalmente, permítanme compartir con ustedes las acciones en la región y al interior de la OEA para avanzaren la implementación de los mandatos del plan de la OEA:
Precisamente, la siguiente semana el Secretario General estará en la Universidad de Harvard firmando el acuerdo entre la OEA y esta prestigiosa universidad. Esta colaboración entre la OEA con el Centro Hutchins de Investigación Africana y Afroamericana de la Universidad de Harvard -institución dedicada al estudio de la historia y las raíces de la cultura de las personas afrodescendientes y la cual está liderada por el prestigioso y reconocido profesor Henry Louis Gates Jr.- contribuirá a promover la incorporación de la historia de África y la población afrodescendiente en la historia oficial de los países de las Américas.
Desde la Secretaría de Acceso a Derechos y Equidad, seguiremos trabajando para contribuir a la prevención, eliminación del racismo y la discriminación racial en las Américas, así como para el reconocimiento, la justicia y el desarrollo de millones de personas afrodescendientes en nuestra región, personas que han contribuido y que siguen contribuyendo a la construcción de nuestra América con su cultura, intelecto, espiritualidad, sangre, sudor y lágrimas.
Muchas gracias!