Comunicado de Prensa
Oficina de Prensa de la CIDH
Washington, DC—En el Día Internacional de la Sordoceguera (27 de junio), la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) llama a los Estados a adoptar medidas especiales para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, niñas y adolescentes con discapacidad sensorial. Al tiempo, urge combatir los estereotipos que refuerzan la discriminación y exclusión por motivos basados en la intersección entre género y discapacidad, así como la impunidad en casos de violaciones a los derechos humanos de este grupo.
Las mujeres, niñas y adolescentes con discapacidad enfrentan un riesgo significativamente mayor de sufrir violencia basada en género en comparación con aquellas sin discapacidad. En contextos familiares o de pareja, este riesgo puede ser entre dos y cuatro veces más alto. Estudios recientes indican que las mujeres sordas tienen el doble de probabilidad de experimentar violencia doméstica. Además, si bien persisten limitaciones en la disponibilidad de datos, algunas fuentes señalan que, en ciertos Estados de la región, hasta el 75% fue víctima de algún tipo de violencia, y en otros, el 21% ha sufrido violencia sexual.
La CIDH ha constatado que la violencia ejercida contra mujeres, niñas y adolescentes con discapacidad no solo puede causar nuevas discapacidades, sino agravar las discapacidades ya existentes y agudizar patrones de exclusión estructural. Las limitaciones para ejercer su capacidad jurídica y los contextos de dependencia aumentan el riesgo de que permanezcan atrapadas en ciclos de abuso. La falta de ajustes razonables y de mecanismos accesibles para denunciar las agresiones profundizan esta situación. Tal como se expone en el informe sobre La situación de los derechos de las personas con discapacidad en las Américas, muchas mujeres sobrevivientes de violencia enfrentan barreras físicas, comunicacionales y actitudinales en los sistemas de justicia, donde son sometidas a prejuicios y escrutinios adicionales, resultando en una revictimización institucional.
La Comisión insta a los Estados a redoblar esfuerzos para garantizar una vida libre de violencias a todas las mujeres, niñas y adolescentes con discapacidad. En ese sentido, llama a implementar medidas para que las mujeres sordas, sordociegas, sordomudas, ciegas, con discapacidad múltiple y de otros tipos, cuenten con medios autónomos de vida y recursos judiciales efectivos. Asimismo, los ajustes razonables necesarios para el ejercicio y goce pleno de sus derechos como, por ejemplo, intérpretes de lengua de señas, intérpretes táctiles, comunicación alternativa.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la OEA cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal y no representan a sus países de origen o residencia.
No. 130/25
10:00 AM