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Washington, D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)
insta al Estado canadiense a proteger y garantizar los derechos humanos de
mujeres y niñas indígenas, en vista de las conclusiones del informe final de
la Investigación Nacional sobre Mujeres y Niñas Indígenas Desaparecidas o
Asesinadas en Canadá (National Inquiry into Missing and Murdered Indigenous
Women and Girls in Canada). La CIDH insta a Canadá a actuar con la
diligencia debida para prevenir, sancionar y reparar cualquier acto de
violencia de género cometido contra mujeres y niñas indígenas y a tomar
medidas concretas, con la participación de las mujeres indígenas, para
implementar las recomendaciones sobre esa cuestión.
El 3 de junio de 2019, se publicó Reclaiming Power and Place, el informe
final de la Investigación Nacional sobre Mujeres y Niñas Indígenas
Desaparecidas o Asesinadas en Canadá. La Investigación Nacional concluyó que
las violaciones constantes y deliberadas de los derechos humanos son la raíz
de las abrumadoras tasas de violencia en Canadá contra mujeres y niñas
indígenas y contra personas dos espíritus, lesbianas, gays, bisexuales,
trans, queer, no-binarias, intersex y asexuales (2SLGBTQQIA). La CIDH
observa que ese informe trata las causas sistémicas de todos los tipos de
violencia (incluida la violencia sexual) contra las mujeres y las niñas
indígenas en Canadá, así como las políticas y prácticas institucionales que
se aplican en respuesta a la violencia que sufren esas personas.
“La publicación de este informe supone un paso importante para revelar la
verdad sobre las desapariciones y los asesinatos de mujeres y niñas
indígenas en Canadá”, señaló la Comisionada Esmeralda Arosemena de Troitiño,
Presidenta y Relatora sobre los Derechos de la Niñez de la CIDH. “Debemos
reconocer los esfuerzos que ha hecho la Investigación Nacional para centrar
el proceso en las víctimas de la violencia, las personas supervivientes y
sus familiares, dándoles una voz que se había silenciado durante años”,
señaló.
“Valoramos positivamente que este proceso de búsqueda de la verdad se
haya centrado en las formas de ser y conocer de las personas inuit, métis y
de las naciones originarias, y que haya incluido una perspectiva no binaria
y con diversidad de género”, afirmó Antonia Urrejola, Relatora de Memoria,
Verdad y Justicia de la CIDH. “El enfoque culturalmente adecuado y con
diversidad de género de la Investigación Nacional es crucial para hacer
frente a la violencia y la discriminación que las mujeres indígenas han
padecido históricamente en Canadá”, concluyó.
La Comisión Interamericana ha concluido que las desapariciones y los
asesinatos de mujeres indígenas en Canadá forman parte de un patrón más
amplio de violencia contra ellas. En su informe
Mujeres Indígenas Desaparecidas y Asesinadas en Columbia Británica, Canadá,
la CIDH hizo una serie de recomendaciones al Estado canadiense. En ese
sentido, la Comisión reconoce que el informe Reclaiming Power and Place da
respuesta a su recomendación de abrir una investigación nacional sobre esta
cuestión.
“En Canadá, hemos documentado que las mujeres y niñas indígenas han
padecido numerosos tipos de discriminación y violencia, derivados de la
marginación histórica, el racismo, el sexismo y la pobreza, junto con
desigualdades estructurales y violaciones de sus derechos relacionados con
sus territorios y recursos naturales”, apuntó la Comisionada Margarette May
Macaulay, Relatora sobre los Derechos de las Mujeres de la CIDH. “El informe
de la Investigación Nacional pide medidas transformadoras para resolver una
situación preocupante que ha devastado a las comunidades indígenas de todo
el país, con un impacto muy específico en mujeres y niñas. Esas acciones se
deben investigar y sancionar de una manera adecuada, y se deben otorgar a
las víctimas las reparaciones correspondientes”, afirmó.
La Comisión reitera que el sistema de derechos humanos ha establecido que
los Estados deben tomar medidas integrales para garantizar la debida
diligencia en los casos de violencia contra las mujeres. Esa obligación
incluye el deber de reparación. Los órganos interamericanos de derechos
humanos han señalado que las reparaciones relacionadas con la violencia de
género deben integrar una perspectiva de género y un enfoque transformador,
lo cual requiere que los Estados aborden la desigualdad y la discriminación
estructural que afecta a todas las mujeres, incluidas las mujeres y niñas
indígenas.
La Comisión insta al Estado canadiense a tomar medidas concretas, con la participación de mujeres y niñas indígenas, para implementar adecuadamente las recomendaciones de la Investigación Nacional sobre Mujeres y Niñas Indígenas Desaparecidas o Asesinadas, para proteger y garantizar de una forma eficaz los derechos humanos de esas mujeres y niñas. En este contexto, la Comisionada Flávia Piovesan, Relatora de la CIDH para Canadá, afirmó que “la Comisión seguirá haciendo un seguimiento de la implementación de esas recomendaciones y seguirá estando a disposición de Canadá para brindarle cualquier apoyo técnico necesario para ayudar al Estado a cumplir sus obligaciones internacionales y los estándares interamericanos sobre esta cuestión”, concluyó.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.
No. 159/19